Un Perro Callejero Se Recostó Sobre Su Velo De Novia. Lo Que Ella Hizo Se Ganó El Respeto De Todos

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Ésta será una de esas historias hermosas…

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Para muchos, los perros son las mascota ideales para tener en casa. Son fieles, buenos compañeros y querendones. Y la historia que te contaremos hoy se trata de un tierno callejero de cuatro patas que apareció en una boda sin ser invitado.

Se pensaría que la novia pondría el grito en el cielo pero, simplemente, se lo tomó con mucho humor. Y estos son los detalles de lo ocurrido…

Esta pareja está formada por Marília y Matheus Pieroni y son de Brasil. Hace poco habían dado el “sí” en San Paulo.

El día que se iban a casar se inició una fuerte tormenta; sin embargo, se casarían contra viento y marea. Afortunadamente, se habían decidido a colocar una magnífica carpa por lo que la celebración no se vio empañada por el mal tiempo.

Todo se estaba desarrollando a la perfección cuando llegó el momento de pronunciar sus votos.


De repente, sin que nadie lo llamara, llegó un inesperado invitado. ¡Y se acostó sobre el velo de la novia!


Muchos pensarían que la novia vociferaría que sacaran al perro, pero no fue. Ella estaba más que encantada con la visita.


El perro había entrado para resguardarse de la tormenta y no halló nada mejor recostarse donde menos se podían imaginar. Afortunadamente, le dejaron quedarse.


Más tarde en la noche, la pareja conversó la posibilidad de adoptar al perrito callejero y lo fueron a buscar, pero ya no estaba.

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Estuvieron una semana buscando al can que les robó el corazón. Hasta que les llegó una noticia esperanzadora.


Lo habían encontrado y lo llevaron donde ellos.


Le pusieron “Snoop” y, hoy en día, es un miembro más de la nueva familia.


Según cuenta Marilia“Le di una larga ducha y estaba muy feliz. La primera noche, durmió muy bien“.


La pareja dice “Todos estamos muy felices de haberlo encontrado”.

La suerte de Snoop cambió sin buscarlo, y fue para mejor. Ese día llovía mucho, y el perrito tomó la mejor decisión de su vida: la de haber entrado a la iglesia y haber conocido a su futuros amos.

 


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