Edificios donde se torture animales no podrán arrendarse para espectáculos públicos y con ello comienza a erradicarse una de las más brutales practicas que algunos defienden como una tradición.
El edificio más importante de la tauromania en Perú es la plaza de Acho que hoy tiene otros fines debido a que fue destinado para recibir a gente sin hogar durante la pandemia para que así estas personas cumplan de buena manera el confinamiento.
Este uso podría extenderse ya que la municipalidad de Lima aprobó que sus edificios no sean rentados para espectáculos con tortura animal, lo que ha sido bien recibido por sociedades animalistas.
“Quedó muy claro que la supremacía de la vida sobre el maltrato animal es política de este gobierno municipal. Esto lo demostró hoy el Concejo de Lima, al aprobar por abrumadora mayoría multipartidaria que sus funcionarios y representantes ante directorios velen porque sus inmuebles no sean utilizados en espectáculos públicos donde se ejerza tortura contra los animales. Sin duda, un paso importante para una ciudad más humana”
Jorge Muñoz (alcalde de Lima) en Twitter
Esta ordenanza no prohibe oficialmente la horrible tradición taurina, pero la limita como espectáculo.
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