8 Hábitos Matutinos Que Debes Eliminar Completamente De Tu Vida

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Aristóteles planteaba la costumbre como una segunda naturaleza. Por lo tanto, hacer algunas cosas sin pensar puede ser tanto perjudicial como beneficioso, especialmente por la mañana, cuando resulta catastrófico la falta de tiempo para todo.

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Toma nota de estos 8 hábitos que no son precisamente los más beneficiosos para comenzar tu día, léelos con atención y asegúrate de modificarlos si lo estás haciendo mal, porque solo depende de ti que tu despertar sea bello y te acompañe lo mejor durante el resto del día.

 

No ducharte por la mañana

Según un doctor de Harvard, la ducha por la mañana acerca a ese codiciado momento de la iluminación porque en estos instantes nuestro cerebro está en estado activo, pero con la ventaja de que no se distrae por estímulos externos. Esto permite generar nuevas ideas alejadas de lo habitual.

 

Tomar una ducha con agua caliente

El agua caliente tiene un efecto relajante y después de una ducha así, lo único que te apetecerá será volver a meterte en la cama. Pero un baño fresco por la mañana alberga una serie de ventajas, vigoriza, mejora la actividad cerebral y estimula el sistema inmunológico. El agua fría a diferencia de la otra, no reseca la piel y según los científicos, las personas que regularmente toman duchas de este tipo s deshacen de 4 kilos de exceso de peso al año aproximadamente.

 

Pasar demasiado tiempo con el teléfono

De la forma en la que pasamos la mañana dependerá en gran medida el resto del día, así que no pierdas el tiempo contemplando la vida de otras personas, mirando fotos de amigos o leyendo sus comentarios. Lo mismo sucede si se comprueban los correos electrónicos del trabajo, porque así es como nosotros mismos ampliamos nuestra jornada laboral. Mejor escucha tu música favorita, dedica tiempo a tus seres queridos o disfruta de prepara un desayuno sabroso y saludable.

 

Perder tiempo eligiendo qué ponerte

Por la mañana abunda el caos y el tiempo es muy escaso, por lo que es mejor no empeorar la situación decidiendo qué ropa ponerse. Para hacerlo más sencillo, reduce la cantidad de la misma. Steve Jobs llevaba sus legendarios suéteres de cuello alto de color negro porque así ahorraba, no precisamente dinero, sino tiempo.

Reserva un lugar en tu armario donde solo se almacenará la ropa de trabajo. Si el código de vestimenta de la oficina está compuesto de una chaqueta negra y una camisa blanca, solo debes poner allí esas prendas. De forma periódica, lleva a cabo una “limpieza” de tu guardarropa y deshazte de las cosas que ya no usas. Lo que ya no te pones, porque no van con la temporada, guárdalo en otro lugar.

 

Desayunar cereales industriales

Una ración de cereales (50 gr.) contiene aproximadamente 4 cucharaditas de azúcar. Una gran dosis de hidratos de carbono “rápidos” en un estómago vacío provoca una liberación brusca de insulina en la sangre, y luego la misma disminución de forma aguda, desencadenando así la aparición de la fatiga y la apatía. La leche, el yogur y la fruta fresca, que se añaden a ellos, tampoco son los alimentos más saludables para tomarlos en ayunas, ya que provoca fermentación.

Una famosos nutricionista, Chelsey Amer, recientemente señaló que una porción de pizza para el desayuno es más saludable que los cereales. En ella encontramos proteínas, grasas e hidratos de carbono lentos, lo que la convierte en un desayuno equilibrado. Lo más importante es para justo después de consumir un solo trozo. Además de pizza, los típicos cereales puede sustituirse por omelet, requesón o carne magra.

 

Cepillarse los dientes después de comer

Después de comer el esmalte de los dientes se vuelve vulnerable, especialmente si has ingerido frutas, cítricos o refrescos, porque estos productos contienen ácido cítrico y fosfórico. Es mejor enjuagarse la boca con agua o con una solución especial y eliminar los restos de comida con hilo dental. Puedes cepillarte con pasta dentífrica pasados unos 30 minutos después de comer.

 

Tomar café solo

 

El café solo al despertar, aumenta el nivel de la hormona cortisol, lo que conduce a incrementarla ansiedad. Y si tomas en ayunas, como algunos lo hacen, puedes acabar sufriendo una gastritis. Los estudios demuestran que el intervalo óptimo para la primera taza debe oscilar entre las 3 y 4 horas tras despertarse. Si, después de todo, no puedes negarte a ti mismo el placer de tomar un café medio dormido, mejor que sea con leche, porque de esa forma se reduce su efecto negativo en la mucosa gástrica.

 

Hacer la cama justo después de levantarte

Al hacer la cama justo inmediatamente después de levantarte, creas las condiciones favorables para la producción de los ácaros del polvo, ya que esta manera no se evapora la humedad que absorvieron las sábanas de nuestro cuerpo durante la noche. Los científicos recomiendan que después de despertarse, se retire completamente el edredón y se abra la ventana para que la misma se seque.


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