Perrito De 10 Años Ha Esperado 3 Años En Un Refugio Y Aún Nadie Lo Ha Adoptado

Compartir en Facebook

Bruno ya tiene 10 años y aún espera encontrar un buen hogar, tarea que tiene a sus cuidadores esforzándose mucho para que él pueda tener una familia que le de cariño.

Publicidad

Bruno, un perrito que fue rescatado ya tiene 10 años y 3 de ellos ha esperado en un refugio para ser adoptado, sin poder lograrlo.

El perrito fue acogido por la Protectora de Barcelona, España, y desde entonces busca una familia, pero nadie lo ha adoptado aún y las razones de ello son inexplicables.

Este perrito pesa 7 kilos y no sabe convivir con niños, pero aún así es un ejemplar perfecto para muchos hogares.

En  La Vanguardia

, se publicó una carta abierta por parte de los cuidadores de Bruno para que alguna familia se interese en el can. El texto está narrado como si fuese el propio Bruno quien hablara.

“Tengo 10 años y peso solo 7 kilos. Y parece que la vida ya se ha acabado para mi. Llevo varios años, tres para ser exactos, en el refugio y todavía estoy esperando a mi humano“, empieza la carta.

“Y que no se asusten si les doy algún que otro mordisco al principio, porque, como no se han portado bien conmigo en mi vida anterior, no llevo muy bien que me toquen. Aunque en el refugio mis cuidadores me han enseñado las caricias, todavía me cuesta un poco creer que las manos humanas son buenas”, se lee en un fragmento de la carta.

“De la protectora se encargarán de ayudarme, con un profesional, para trabajar mis problemas en casa, porque creedme, tengo muchas ganas de volverme un perrito cariñoso y haré todo lo posible para que así sea. Solo necesito que me entiendas y que no te rindas”, continuó.

Quienes cuidan de este adorable perrito no se darán por vencidos hasta conseguir el objetivo de que sea adoptado.

“Esta es la historia de muchos perritos como yo, los invisibles, estos que todo el mundo ve con los ojos, pero no con el corazón. Somos estos perritos que hemos tenido muchas razones para perder la confianza en la humanidad y que necesitamos a alguien que nos la devuelva”, expresó.

“Aunque en los refugios nos cuidan bien, estos sitios deberían ser estancias pasajeras y no hogares para toda la vida y… la vida pasa… Se está acabando… Los 10 años se convierten en 11, los 11 en 12 y así hasta que se me cierran los ojos sin poder encontrar a una familia de nuevo”, agregó.

“No entendemos por qué estamos aquí. No entendemos por qué nuestros hermanos vienen y se van con familias nuevas y nosotros estamos aquí condenados, solo por ser un poco diferentes, pero no malos. Yo te sigo esperando y hasta mi último respiro te seguiré esperando“.

Bruno se merece un hogar y mucho amor, sólo esperamos que lo consiga muy pronto.


Publicidad