Don Goyo se dedicó a la producción de azúcar, pero hoy a sus 94 años sigue trabajando para poder sobrevivir. Sus hijos no lo visitan hace años y hoy vive en una casa precaria con una cama rota y sin compañía alguna.
Don Goyo vive en Veracruz y gracias a Karla Obil, su historia se ha dado a conocer. La mujer un día vio a un anciano caminar lentamente con un bastón y ella le pregunto que estaba haciendo, él dijo que había trabajado en la producción de azúcar toda su vida y que seguía en ello para poder comer.
La mujer no podía creer que este anciano de 94 años siguiera trabajando, por lo que le dijo que al día siguiente iría a su casa a visitarlo y que lo ayudaría, pero nunca pensó encontrar a este hombre viviendo en condiciones tan deplorables.
Obil publicó la historia de Don Goyo en redes sociales para pedir ayuda para el anciano y poder así encontrar a su familia. Este anciano sufre por tener que trabajar a su avanzada edad y por no tener lo básico para vivir dignamente.
Karla no quiere que Don Goyo siga trabajando y se ha comprometido a ayudarlo. Sus pies, manos y espalda están tan deteriorados que este anciano hace un gran esfuerzo para tener con que alimentarse.
En redes sociales la gente ha acudido al llamado de ayuda y Don Goyo está más alegre porque tiene compañía. Hasta ahora se ha conseguido rapa limpia y alimentos para él, además de zapatos nuevos. Además su casa ha sido reacondicionada para que viva mejor. Durante este proceso aparecieron 8 ratones.
Ahora Karla quiere juntar dinero para construirle un baño a Don Goyo, pintar su casa y mejorar sus condiciones de vida. De su familia en tanto, no se sabe nada, pero ya hay quienes están dispuestos a acompañar a Don Goyo para que nunca más esté tan solo.
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