Con 14 Años Confecciona Peluches Y Los Obsequia A Niños de Hospitales Para Entregarles Felicidad

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Un pequeño gesto puede ser un gran detalle para una persona, sobre todo cuando lo recibe en situaciones de adversidad.

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Campbell Remess tiene 14 años y es pura bondad. Él ocupa su tiempo libre en confeccionar peluches para regarlos a niños y adultos que están en los hospitales.

Este proyecto es hermoso, sobre todo si pensamos que él podría hacer otras cosas con su tiempo, por eso queremos compartirte esta inspiradora historia.

El origen de su motivación

Campbell tenía 9 años cuando quiso hacer algo por los niños hospitalizados, así fue como pensó en realizar una compra de juguetes para hacerlos más felices. Tras contarles su idea a sus padres, ellos le dijeron que era muy difícil realizarla porque no tenían el dinero para ayudarlo en su propósito ya que en su familia son 9 hijos. Fue así como pensaron en darle un giro a a la idea para poder materializarla.

Los inicios de una gran idea

Campbell aprendió a coser para confeccionar los obsequios él mismo. Busco patrones en internet y puso su idea en marcha, comprando materiales con sus ahorros y trabajando 5 horas para obtener su primer peluche. Sabía que debía mejorar y así lo hizo para poder cada año regalarle a niños hospitalizados un presente confeccionado por él.

Una iniciativa que traspasó fronteras

Su iniciativa comenzó a conocerse en distintas partes del mundo mientras sus peluches cada vez eran mejores y Campbell quería seguir cosiendo para llegar a más personas. Este niño llamó a su idea ”Proyecto 365” ya que cada día confecciona un peluche.

Campbell ya ha cosido más de 1400 peluches, algunos personalizados y con el nombre de su dueño. Los niños cuando reciben una de sus creaciones se muestran muy agradecidos, con una sonrisa y abrazos. Algunos incluso le han escrito cartas después de un tiempo para agradecerle su bello gesto. Campbell quiere ver a la gente feliz, sobre todo cuando están pasando por momentos difíciles de salud.

Un peluche especial

Campbell también ha vivido momentos difíciles ya que a su padre hace algunos años le detectaron cáncer y su tumor era del tamaño de una pelota de tenis.

Cuando todo era adverso, este niño confeccionó un peluche especial para su papá para que pudiera ayudarle a estar mejor y su fe logró que el ánimo de su padre estuviese mejor y que más tarde logrará librarse de la cruel enfermedad.

Lo que hace que este proyecto sea posible

Hoy Campbell recibe donaciones para ayudarlo con su proyecto. También realiza algunas ventas para poder cubrir los gastos de materiales. Campbell no pretende parar este proyecto porque ver feliz a otros es muy importante para él.

Sonrisas de niños gracias a un peluche:


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