Te Enseñamos A Limpiar Correctamente Tu Colchón

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Seguro nunca has pensado que pasas un tercio de tu vida sobre tu colchón. La verdad es que si no eres bueno para dormir,  puede ser un poco menos, pero la realidad es que dormimos entre un cuarto y un tercio de nuestras vidas y todo ese tiempo lo pasamos sobre el colchón.

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A lo largo del tiempo, un colchón va absorbiendo suciedad que viene del cuerpo y del exterior (aunque esté cubierto por sábanas, secreciones como el sudor las traspasan cada noche y, en el caso de los colchones de los niños, eso incluye la orina). Además, un colchón acumula ácaros que vienen de las sábanas y mantas, y aunque las laves con frecuencia, permanecen en él.

A pesar de todo esto, muchas personas no limpian el colchón nunca, y por lo general es porque no saben cómo hacerlo. Aquí podrás aprender una técnica para limpiarlo de forma muy sencilla.

 

Qué vas a necesitar: 

3 cucharadas de bicarbonato de sodio
2 gotas de jabón líquido
250 ml de 3% de peróxido de hidrógeno
1 botella con atomizador
1 paño limpio

Preparación: 

1. Mezclar en un recipiente el peróxido de hidrógeno y el bicarbonato de sodio hasta que el polvo se disuelva por completo.

2. Agregar el jabón líquido y vuelve a mezclar.

3. Verter en el atomizador.

Cómo utilizarlo

Para usarlo debes agitar bien la botella y rociar la preparación sobre las manchas y zonas oscuras que encuentres en el colchón. Posteriormente, dejar que se seque y luego frotar con el paño seco. Eliminar los restos de mezcla con una aspiradora.

Esta mezcla no se puede guardar, porque pierde sus propiedades, así que se debe preparar sólo lo que vas a usar y aplicar en el momento.

Consejos para cuidar tu colchón

Otro consejo es que trates, al menos algunas veces a la semana, no hacer la cama apenas te levantes, para que las sábanas se aireen antes de cerrar la cama.
Cuando cambies las sábanas, aprovecha para sacudir el colchón y dejarlo un rato al aire libre. Si entra el sol en la habitación, deja que le de directamente al colchón descubierto.

Se debe dar vuelta el colchón periódicamente en ambos sentidos (cambia la cara sobre la que se apoya, y también coloca el lado de la cabeza para el lado de los pies, pero no las dos cosas a la vez).
Algo muy importante y que todos hacemos es no acostumbrarse a usar la cama como sillón ni hacer actividades sobre ella (como escribir en la computadora, por ejemplo), porque el colchón solo está preparado para estar en forma horizontal.


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