Braelyn nació y tuvo que vivir un tiempo junto a una familia adoptiva, pero luego su padre biológico ganó su custodia.
Los primeros años de Braelyn fueron complejos.
Según Love What Matters, el bebé no pudo ser cuidado por su madre y tuvo que vivir en una familia adoptiva donde Julie Long fue quien se encargó de cuidar de él.
Julie y su familia tiene una certificación de familia adoptiva y hace 8 años cuidan a niños de forma temporal.
Julie cuidó a Braelyn durante los primeros años de vida del niño. Luego de eso su padre biológico ganó su custodia y Julie pensó que ya no vería más al pequeño, como había sucedido con otros.
Sin embargo, el padre de Braelyn decidió contratar a Julie como cuidadora del niño mientras él tiene que salir a trabajar.
En los 8 años que lleva cuidando a niños como sus hijos adoptivos, ha tenido que dejar ir a muchos que luego se marcharon con sus nuevas familias adoptivas permanentes o con sus padres biológicos.
“La parte más difícil es decir adiós, sin dudas. Cada vez que paso por eso, paso por un proceso de duelo. Siento que hay pedacitos de mi corazón dando vueltas y no tienen idea. Todos nuestros niños adoptivos han tenido menos de 4 años, por lo que la mayoría de ellos no se acuerda de nosotros“, dijo.
Julie ha estado en momentos muy importantes de Braelyn. “Me encanta haber sido parte de todas sus ‘primeras veces’. Me hace querer besarlo y darle abrazos“ concluyó la mujer.
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