Meghan Markle Tuvo Que Tomar Una Triste Decisión Para Poder Casarse Con El Príncipe Harry

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Claro está que una actriz reconocida tiene otro estilo de vida en comparación a personas que se desempeñan en trabajos alejados de la luz pública, no obstante, entre ser actriz de la tv a ser novia de un príncipe y estar próxima a convertirse en la Duquesa de Sussex, hay un abismo de diferencia. Porque más allá de las implicancias propias de una vida ligada al mundo de los espectáculos, la rutina diaria de Meghan Markle en Estados Unidos no era muy diferente a la de cualquier otro ciudadano norteamericano. Sin embargo, ahora que será de la realeza británica, debe asumir una serie de consecuencias. Hace un par de años, Meghan Markle se veía como una actriz común y corriente, pero todo eso está por cambiar.  Estas eran algunas de sus fotos antes de el revuelo mediático.

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No podemos dudar que por mucho que su prometido Enrique de Gales (príncipe Harry) sea un tipo sencillo, el sólo hecho ser parte de la realeza lo obliga a seguir ciertos protocolos a los que obviamente Meghan todavía no está acostumbrada, pero que deberá asumir en un futuro muy próximo.

 

 

 

En esta ocasión, les contamos sobre una de las más difíciles decisiones que Meghan tuvo que tomar antes de mudarse al Palacio de Kensington en Inglaterra y fue la de abandonar a alguien que significaba parte muy importante de su vida. Su amado perro que la había acompañado desde hace muchos años.

 

Megan , de 36 años, tiene dos mascotas que rescató de la calle. Una de ellas es un beagle llamado Guy y un pastor labrador de nombre Bogart. Es tanto el amor que siente por ambos que comparte frecuentemente sus fotografías en Instagram. Sin embargo, ella sólo pudo llevarse a uno de los dos consigo al país británico.

 

El palacio confirmó que Guy obtuvo autorización legal para vivir en el Palacio de Kensington, pero que Bogart, el beagle fiel compañero de Meghan, se vio obligado a permanecer en Estados Unidos.

Los animalistas han expresado su tristeza en las redes sociales y han especulado que Bogart no voló al Reino Unidos por ser “demasiado grande o viejo” . Sin embargo, la casa real se negó a explicar los motivos por los que Bogart no fue permitido en Reino Unido.

 

En la primera entrevista de la pareja después de su compromiso, Meghan contó a la BBC sobre sus mascotas: “Uno se está quedando con amigos muy cercanos y mi otro pequeño amigo está aquí desde hace un tiempo. Creo que lo está haciendo bien”, dijo en dicha entrevista.  Para ella debe ser muy complejo, pero en esta vida debemos asumir que todo tiene un costo y ella tomó la decisión de asumirlo.


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