Gustavo tiene 18 años y Paloma 19. Ellos viven en São Paulo y padecen de una enfermedad cardíaca genética que los hizo perder a un hermano de sólo 15 años anteriormente.
Dos hermanos necesitaban un transplante de corazón con suma urgencia y afortunadamente los órganos llegaron con 48 horas de diferencia para ellos, lo que en ese país se tilda de milagro ya que conseguir que una situación así se dé, es casi imposible.
Gustavo y Paloma viven en Garça, São Paulo en Brasil y ambos recibieron un transplante de corazón en el hospital das Clínicas de Botucatu con sólo dos días de diferencia.
Ambos jóvenes tienen la enfermedad de Danon, condición genética que debilita el músculo cardíaco. Ellos perdieron a un hermano de 15 años debido a esta situación y por ello el miedo de correr este peligro era inmenso.
“Esta enfermedad afecta al corazón, provocando una hipertrofia del músculo cardíaco. El músculo se vuelve más engrosado y, en algunos casos, el corazón también puede dilatarse. Se asocia a arritmias severas y muchos pacientes también tienen muerte súbita”, explicó a G1
El primer órgano llegó el 9 de abril y fue Gustavo el beneficiado con un nuevo corazón. El segundo llegó el domingo 11 de abril y mientras Gustavo estaba internado en la UCI, su hermana Paloma se preparaba para el transplante en un pabellón.
Noeli Rodrigues de Souza, la madre de estos dos jóvenes beneficiados con un nuevo corazón aún no se explica lo vivido: “Como tenía una muerte en casa, tenía mucho miedo de ver dos más, entonces este milagro que sucedió dentro de estos siete días fue tremendo para mí. Hasta la medicina se asombró con lo sucedido. En medio de una pandemia aparecieron dos corazones así para los dos hermanos, […] fue muy lindo, no me canso de agradecer” dijo la mujer al medio de comunicación brasileño.
Lo sorprendente es que la donación de órganos es escasa en situaciones normales y aún más en plena pandemia. Según G1 el mes pasado, 135 personas esperaban un transplante de corazón.
La madre de los jóvenes dijo que sólo tiene que “agradecer a las familias que donaron a mis hijos porque es maravilloso lo que hicieron. Les agradezco mucho de corazón”.
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