Con Sólo 2 Años Niño Sobrevive A Transplante De Médula, Una Leucemia Y Al COVID-19

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Miqueas Lionel tiene dos años y vivía en Ushuaia, Argentina hasta que tuvo que trasladarse a Buenos Aires debido a sus enfermedades.

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Este niño recibió un transplante de médula, luego de esperar debido a una leucemia y luego se contagió de COVID-19, enfermedad a la que también venció. Hoy se encuentra sano y feliz tras una dura y larga batalla.

Este niño y su familia son de Tierra del Fuego, más precisamente de Ushuaia, pero por las enfermedades de Miqueas debieron trasladarse a Buenos Aires.

“En un control pediátrico, nos dijeron que Miqueas presentaba tres valores en sangre que no eran normales. 

A los días, le diagnosticaron leucemia mieloide aguda. Tuvimos que hacer vida nueva acá”.

–comenta Brian, el padre de Miqueas al medio TN

La quimioterapia y otros tratamientos duraron un mes y aunque hubieron complicaciones porque el pequeño se contagió de otros virus en el hospital, finalmente luchó y ganó su batalla a una muy corta edad.

Tras una primera ronda de quimioterapias, la enfermedad quedó en remisión, pero Miqueas volvió a enfermar de una forma más fuerte aún.

Su única opción era un transplante y para colmo contrajo neumonía y mucositis, lo que empeoró las defensas del pequeño tras recibir quimioterapia.

“Hubo períodos en que levantó más de 39 grados de fiebre. Otros en los que ingresaron hongos en su sangre por las bajas defensas. La pasamos muy mal”.

–comenta Brian al medio TN

Tras buscar donantes de forma internacional al fina apareció uno en Alemania y eso le dio tranquilidad momentánea a la familia pues Miqueas sufrió una fractura de pierna y debido al tratamiento contra la leucemia desarrolló una cardiopatía.

“Era una cosa de no creer” dijo el padre del pequeño cuando su hijo contrajo coronavirus, pero al final, Miqueas salió adelante y venció a todos los obstáculos que se atravesaron en su camino.

Hoy este niño está sano luego de tantos impedimentos para vencer cada dificultad en su salud ha vuelto a sonreír, a jugar y a disfrutar de todo el amor de su familia que nunca bajo los brazos y siempre hizo hasta lo imposible para que él saliera adelante.


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