107 Años Tenía Al Fallecer, Recientemente, El Héroe Que Salvó A 600 Niños De Los Nazis

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La Segunda Guerra Mundial fue el conflicto armado más grande de la historia universal en el que se enfrentaron los países que conformaban las Potencias Aliadas y las Potencias del Eje, entre 1939 y 1945. Tras seis años de dura pelea, el 14 de agosto de 1945, se declara el final de la guerra con la victoria de los Aliados ocurrida tras la caída de los regímenes de Adolf Hitler en Alemania y Hideki Tojo en el Imperio del Japón. La historia nos cuenta que fue un suceso histórico que afectó a millones de vidas de una gran cantidad de países principalmente en Europa. Algunos países como Holanda sufrieron la invasión de los Nazis, quienes tomaron el control de casi todo aspecto de la vida, pero eso no evitó que muchos se resistieran, dentro de este contexto sangriento y cruel, una persona destacó por la ayuda que brindó a los más desprotegidos.

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“Nicholas Winton y Johan van Hulst. Ambos salvaron a cientos de niños durante el holocausto. Winton murió a los 106 y Van Hulst murió la semana pasada a los 107. A veces, los buenos no mueren jóvenes”

La persona que queremos destacar en esta oportunidad es el profesor Johan van Hulst, quien el pasado 22 de marzo murió a los 107 años, pero lo realmente destacable fueron sus acciones en vida, por lo que es sin duda una fuente de inspiración. Todo comenzó cuando os Nazis ocuparon su país, en ese entonces había un teatro cerca de su escuela de formación de profesorado. En dicho teatro, llamado Hollandse Schouwburg, dejaban judíos antes de deportarlos a los campos de concentración.

“Desde este lado del mundo y en representación de la humanitad, envío mis más sentidas condolencias. La muerte de Johan van Hulst es el inicio del final de la generación que realmente se preocuparon por todos los reprimidos e incapacitados. La contribución de Hulst al mundo es digna de reconocimiento”

La casualidad de poder tener a los judíos cerca cambiaría su vida para siempre, ya que él y algunos vecinos de la zona pensaron que debían hacer algo para salvar a los niños que eran separados de sus padres. Cuentan que los menores de 12 años estaban retenidos en un espacio específico, aparte de los adultos.

Fue Johan junto a otros vecinos, que se las ingeniaba para no llamar la atención de los alemanes y poder salvar a cuantos pudiesen. Según contaba en vida, existían dos momentos ideales para que todo saliera a la perfección.

El primero era cuando llegaba la hora de la siesta de los niños, ya que los guardias nazis descuidaban su vigilia al lugar. El segundo era cuando pasaba el tranvía, que aún cruza la calle del lugar. En dicho momento, el tranvía les permitía tapar la vista hacia donde estaban y podían pasar en bicicleta con el niño oculto en un saco.Sin duda una maniobra muy arriesgada.

 

Durante los años 1942 y 1943 pudieron rescatar y esconder uno por uno a un total de 600 niños. Por desgracia, no podían rescatar más, y no todos tuvieron la misma fortuna, porque eran muchos; sin embargo, dicho acto le dio el reconocimiento de héroe de guerra en 1972. Algunos de los niños quedaban ocultos en la escuela donde trabajaba el profesor.

No obstante, llegó el año 1945, cuando tuvo que esconderse porque empezó a ser buscado por los nazis. EL héroe dejó su país, pero regresó cuando terminó la ocupación.

En la publicación de Twitter más abajo, se leer  “Un héroe. Que descanse en paz” y abajo hay un breve resumen de por qué es un héroe.

En la actualidad, existe un puente en la capital de Holanda que lleva su nombre en honor a su valentía. No obstante, a él no le agradaba mucho recordar esos tiempos, porque pensaba en los otros niños que no tuvieron la misma suerte. Éstas fueron sus palabras:

“No me gusta hablar de esa época. No me gusta ser protagonista de nada, porque sólo pienso en los miles de niños que no pudimos salvar”

La institución Yad Vashem lo reconoce y lo recuerda como uno de los héroes que salvaron vidas judías sin pertenecer a la religión. En 1951 empezó otra etapa de su vida, la de senador de su país y sería parte importante de la política hasta 1981. Por fortuna,  este hombre tuvo una vida larga y vivió muchos años después de terminada la Segunda Guerra Mundial. Si duda contar con personas como él en la sociedad, que marcan una gran diferencia, es muy positivo. Este hombre llamado Johan van Hulst le recuerda a la humanidad que para ser héroe no es necesario tener capa ni superpoderes, sólo las ganas de ayudar al prójimo.


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