Cómo Identificar Y Eliminar Los Parásitos De Tu Cuerpo Usando Clavo Seco Y Linaza

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Se conocen como “lombrices” de estómago, pero son realmente parásitos intestinales que pueden desencadenar peligrosas enfermedades cuando colonizan el intestino. Existen varios tipos: protozoos (como la Giardia) o guanos (como las tenias), y todos consiguen entrar al cuerpo mediante alimentos o líquidos contaminados.

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Luego, el factor de riesgo principal es la exposición a ambientes insalubres o con condiciones sanitarias deficientes, aunque también se puede dar por una mala manipulación de alimentos o la contaminación cruzada (contacto con algún elemento contaminado por alguien infectado).

La gravedad puede variar de acuerdo a la respuesta del sistema inmunitario, y por ello es importante prestarle atención desde los síntomas más tempranos ya que hay un continuo riesgo de complicaciones.

Existen remedios naturales que podrían ayudarnos a expulsarlos en etapas tempranas, como el clavo seco y la linaza, reconocidos por su capacidad de limpiar el intestino sin alterar la flora bacteriana.

Tratamiento de clavo seco y linaza

La mezcla de estos dos ingredientes ayuda a restablecer el buen funcionamiento del intestino, ayudando a minimizar el impacto negativo que producen las infecciones por parásitos. El clavo seco y la linaza atacan estos microorganismos y alteran el ambiente que necesitan para continuar desarrollándose.

Y todo ello sin alterar el pH de la flora intestinal (como la mayoría de los remedios). Por el contrario, ambos ingredientes ayudan a fortalecerla para mejorar la respuesta contra las infecciones.

El clavo de olor

Sus propiedades antiparasitarias, antibacterianas y antiinflamatorias que pueden ayudar a erradicar distintos tipos de microorganismos nocivos que pueden proliferar en el sistema digestivo.

Sus aceites esenciales consiguen detener eficazmente el crecimiento de los parásitos, además evita que estos organismos liberen toxinas por el torrente sanguíneo evitando que generen complicaciones en la salud. Asimismo, reduce la irritación del revestimiento del intestino, calmando la hinchazón y el dolor abdominal frecuente.

 

La linaza

Excelente fuente de fibra, ácidos grasos poliinsaturados y fitoquímicos, la linaza es también un gran remedio para una variedad bastante amplia de problemas digestivos.

Aporta fibra soluble (una sustancia gelatinosa que atrapa toxinas y facilita su eliminación) y fibra insoluble (necesaria para barrer los desperdicios acumulados al interior del colon). Ademá, tiene un suave efecto laxante que combate el tránsito lento para aliviar el estreñimiento.

También fortalece el sistema inmunológico, aumentando la presencia de anticuerpos que ayudan a luchar contra las infecciones. Sus efectos antiparasitarios y antiinflamatorios restablecen la salud digestiva ante la presencia de estos organismos, junto con nutrir la flora intestinal y prevenir su deterioro.

 

Preparación del remedio con clavo seco y linaza

Este remedio es un buen complemento a un tratamiento contra las infecciones parasitarias, pero también se puede consumir regularmente para prevenirlas.

Ingredientes

  • 1 y 1/2 cucharadas (20 gramos) de clavo seco
  • 3/4 taza (unos 100 gramos) de linaza

Preparación

Tritura el clavo en un mortero o muélelo hasta hacerlo polvo. Haz lo mismo con las semillas de linaza, y mezcla ambos polvos.

Modo de consumo

Agrega un par de cucharadas de la mezcla en una taza de agua y bébela en ayunas. Repite el proceso por 3 días seguidos, descansa 3 días y luego retómalo. Opcionalmente, puedes añadirlo en un batido durante el desayuno o agregarlo a zumos de fruta de tu preferencia.

Síntomas de enfermedad por parásitos

Algunas infecciones parasitarias pueden no producir síntomas contundentes pero que, una vez desencadenados, pueden desencadenar algunas reacciones que nos permiten sospechar de su desarrollo.

Los síntomas incluyen:

  • Tos seca
  • Picor en la zona anal o vaginal
  • Náuseas y vómitos
  • Episodios de diarrea, cambios en el color y textura de las heces
  • Cambios en el apetito, pérdida de peso sin razón aparente
  • Deficiencias nutricionales
  • Sensación de fatiga, insomnio e irritabilidad
  • Inflamación y dolor abdominal

Si alguna de estas manifestaciones se ponen severas con el paso de los días, es urgente consultar con un médico inmediatamente.

Evita las infecciones por parásitos reforzando las medidas de higiene, especialmente al manipular alimentos y objetos de uso compartido.


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