Seferino Hernández, de 83 años, llevó a su esposa que sufre de Parkinson en un triciclo hasta un centro de vacunación.
Un anciano de la ciudad de Celaya transportó a su esposa hasta un centro de vacunación para protegerla del coronavirus.
La esposa de Seferino Hernández sufre de Parkinson severo por lo que es incapaz de moverse por sí sola. Ella pertenece al grupo de riesgo ante el virus que nos aqueja, por eso este hombre se las ingenió para llevarla a recibir la vacuna.
El hombre subió a su esposa en un triciclo, la afirmó a una silla y recorrió la ciudad empujándola hasta un auditorio acondicionado para recibir la vacuna correspondiente.
Al llegar los enfermeros se dieron cuenta de que este hombre cargaba solo con su esposa y les costó creer que hayan realizado el recorrido debido a su edad.
Hernández dijo que el departamento de familias de México le prometió que trasladarían a la mujer para que recibiera la vacuna, pero cuando llegó la fecha para recibir la dosis, no siguió esperando y la lentitud del sistema lo llevó a ingeniárselas.
Esta pareja lleva más de 50 años de matrimonio y en un mes más recibirán la segunda dosis de la trascendental vacuna, esperando que la próxima vez sean prioridad, aunque él está dispuesto a transportarla de nuevo para que ambos se mantengan sanos y salvos.
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